Reconoce que los argumento a favor de las humanidades enfatizan su importancia para el pensamiento crítico, la conciencia cultural, la responsabilidad histórica y para la formación de ciudadanos competentes y democráticos.
La Semana Santa me ha sorprendido redactando El deseo interminable, una historia de la evolución de las culturas interpretada como historia de la búsqueda de la felicidad. Era inevitable relacionar ambos hechos. Las religiones tienen una especial relación con la búsqueda de la felicidad.
Siempre me ha interesado la estupidez. Puesto que existe una teoría científica de la inteligencia, debería haber otra igualmente científica de la estupidez.
En LA VANGUARDIA, Xulio Ríos, director del Observatorio de la Política China, escribe sobre la importancia que los “valores asiáticos” tienen en la actual pugna por la hegemonía global. Ya he tratado el tema en el Panóptico 32 y me alegra ver confirmada mi interpretación. China importó el modelo de valores elaborado en Singapur, pero le añadió los “valores socialistas centrales
La descolonización y el problema de la universalidad. En los años 80 apareció el poscolonialismo lanzado por Edward Said, tan influido por Michel Foucault como por Frantz Fanon. Según esa escuela de pensamiento, la descolonización había dejado intactas las representaciones de los colonizadores sobre los colonizados. Lo importante era deconstruir esos fantasmas heredados de la colonización. Los estudios descoloniales se han desarrollado en los 90, teorizados por intelectuales sudamericanos como Ramon Gosfoguel, profesor en Berkeley (California), para quien todo el sistema capitalista actual es una herramienta para dominar a los países del Sur. Es necesario descolonizar todo, desde la literatura a los valores de la Ilustración, percibidos como no siendo más que una astucia para promover los valores occidentales. Desde el Panóptico vemos claro que la universalidad de los valores ha sido la gran fuerza emancipadora, la que mantuvo la lucha contra la esclavitud, por los derechos de la mujer y de la infancia, por la igualdad de voto. Por la influencia que ha tenido Foucault en el diseño de las teorías que rechazan la posibilidad de una verdad objetiva es por lo que desde el principio del Panóptico señale su oposición al Panóptico de Foucault.
En realidad, he releído el libro de Samuel P. Huntington titulado El choque de civilizaciones, publicado en 1996. Advertía que el tema fundamental de la política internacional es el choque de civilizaciones.