El estudio del adiestramiento de animales nos permite aclarar este sorprendente hecho. Amaestrarlos significa aprovechar su capacidad de aprendizaje para someter su conducta a pautas impuestas desde fuera por un cerebro mas desarrollado.
Ruth Wodak, una lingüista austriaca especializada en el discurso político, ha acuñado la expresión “normalización de la desvergüenza”, para designar una serie de prácticas que están deteriorando el discurso público.
El índice del libro tiene que indicar las vías por las que unos deseos básicos -compartidos con nuestros parientes animales- se expanden por el poder simbólico de la inteligencia y crean unas nuevas necesidades que mediante el juego de éxitos y conflictos dan lugar a las instituciones humanas.
Ponerse morena tiene éxito porque es un acto de liberación. Estamos descifrando el “sistema de la moda”. El gusto de la mujer por salir al exterior, al aire libre, por la movilidad, por no ser excluida de actividades reservadas al hombre.