Construyendo China, (Bellaterra 2021), de Mobo Gao, intelectual chino que emigró a Australia en 1990, donde dirige el Confucius Institute, de la Universidad de Adelaida. Su libro se basa en la tesis de que el poder produce conocimiento, y que la historia de China ha sido siempre “producida” por Occidente, y falseada por él. Para deconstruirlo, en la actualidad está elaborándose un conocimiento de China desde la propia China. Como muestra reflexiona sobre dos etapas especialmente conflictivas: el Gran Salto adelante y la Revolución cultural”.
Piensa que “solo los ingenuos liberales, chinos anti maoístas y anticomunistas todavía se aferran a la historia de la verdad universal, más allá del interés nacional”. Está claro que la devaluación de la verdad, que denuncié en el Panóptico 27 ha llegado también a China.
La tesis del libro es que China está buscando redefinirse a sí misma, con el objetivo de ejercer una “función civilizatoria” a escala mundial. El siglo XIX fue el siglo de Inglaterra: el siglo XX, de Estados Unidos; el XXI será el siglo chino. Hace una crítica de la corrupción y las injusticias occidentales. Se mueve en un modelo político próximo al expuesto en el documento «Pensamiento de Xi Jinping sobre el socialismo con características chinas para una nueva era», que en 2017 se agregó a la Constitución tras el XIX Congreso del Partido Comunista Chino. Su objetivo es potenciar una “democracia unipartidista”, basada en el socialismo “a la china”, es decir, asumiendo la tradición confuciana, y los valores asiáticos, pero conociendo bien los avances occidentales para superarlos, mediante una especie de “capitalismo de Estado”. Incluye de nuevo el culto a la personalidad. El problema de la unidad de la nación china es complejo, porque están reconocidas 56 etnias diferentes.