Desde el Panóptico, al ver los destrozos producidos por la invasión de Rusia, se plantea una interesante pregunta: ¿Debería pagar Rusia lo destruido por su agresión a un país extranjero? Lo que estoy planteando es el tema histórico y jurídico de las reparaciones de guerra, es decir los pagos que el vencedor exige al vencido para cubrir los daños causados durante una guerra. La costumbre es antigua. Ya Roma impuso grandes indemnizaciones a Cartago después de la primera y segunda guerras púnicas. Después de la guerra francoprusiana, Francia fue obligada a pagar a Alemania una indemnización de guerra de cinco mil millones de francos de oro en 5 años. En la Primera guerra mundial, Alemania impuso a Rusia unas reparaciones por valor de seis mil millones de marcos. Antes de terminar la guerra había pagado 240. En el Tratado de Versalles, al final de la guerra, Alemania aceptó pagar 132.000 millones de marcos de oro. John Maynard Keynes escribió un libro que tuvo una gran influencia, criticando las enormes reparaciones impuestas a Alemania: Las consecuencias económicas de la paz (RBA, 2012). Pensaba que acabarían provocando otra guerra, como en efecto sucedió. Puede verse en detalle en la extraordinaria obra de Zachary D. Carter: El precio de la paz. Dinero, democracia y la vida de John Maynard Keynes, (Paidós 2021).
Keynes me ha interesado siempre por el interés que tenía en los motores emocionales de la economía. Se sintió decepcionado al ver que los líderes del Imperio británico se mostraban tan entusiasmados por la conquista y la dominación como el káiser y Clemenceau. Pensaba que el orden previo a la guerra -acumulación basada en la desigualdad- “dependía de condiciones psicológicas inestables que es imposible reproducir”. Y auguraba una catástrofe: “Si aspiramos deliberadamente al empobrecimiento de la Europa central, me atrevo a predecir que la venganza no tardará”. Después de la II guerra Mundial, Alemania aceptó pagar 23.000 millones, aunque la primera petición de los aliados fue de 320 mil millones, una cifra imposible de pagar. Después de la guerra del Golfo, Irak aceptó pagar las reparaciones por su ataque a Kuwait.
No tengo ninguna esperanza de que Rusia pague económicamente la destrucción que su máquina de guerra ha causado en Ucrania, pero he pensado que debía recordar este tema. Y también que la Asamblea general de la ONU aprobó el 16 de diciembre de 2005, la resolución 60/147, titulada Basic Principles and Guidelines on the Right to a Remedy and Reparation for Victims of Gross Violation of International Human Rights Law and Serious Violation of International Humanitarian Law.